Ustedes los occidentales tienen relojes, nosotros lo occidentales tenemos tiempo... (Provervio Oriental)
En un mundo de liebres correlonas que han sido inoculadas todas con el virus de la angustia hay que ponerse en pausa y hablar con alguna tortuga sabia que nos comparta, aún sin decir palabra alguna su milenaria sabiduría...
Las liebres correlonas si bien no se puede decir que viven plenamente, subsisten a mil por hora, la vida es algo que pasa borrosamente como si estuvieran viajando a bordo del tren bala, cuando llegan a un elevador le pican impacientemente al botoncito como si este acto hiciera que este bajara más rapido, comen, cogen y aman rapidito a la manera conejil , estando sin estar porqué el vértigo al que están acostumbradas no les permite quedarse quietas porque muchas veces en el reposo se encuenrtran a sí mismas y le aterra su reflejo, así que comienzan a moverse... Por eso a algunas liebres las aterran los domingos, cuando la vida se afloja de sus correas y aguantan esas horas mansas apagando la mente y prendiendo la tele...
Las tortugas sabias, al contrario de las liebres correlonas, conjugan los verbos y la vida en tiempo presente, viven despacio, comen despacio, aman despacito, ahhh pero eso si son constantes en todo aquello que emprenden... Despacito paso a pasito pero sin dejar de avanzar un solo dia... Pero al avanzar despacio pueden admirar una flor, olerla, apreciar sus formas... Gozar cada comida y cada bocado mientras platican con algun otra tortuga o alguna oruga sabia...
Las liebres viven nerviosas, muchas aparte de su lechuguita beben de a madre licor de zanahoria con 38 grados de alcohol y los domingos machacan algún tafil con su conejina para que los nervios no las hagan picadillo.
Prefiero ser tortuga que liebre...
Y ahora que estoy en este preciso y precioso momento gozando de algunas horas mansas y juguetonas para planear el año que viene, tengo a mi vista una liebre impaciente y una tortuga sabia para orientarme... Pero cualquiera que se imponga eso si hay que estar consciente que todos mis planeación será vana si llega a mi vida y a mi alma "El Síndrme del Zopilote Estreñido" Un terrible mal que te hace planear planear y planear y no obrar ni un poquito.
Bonito lunes.